miércoles, 29 de octubre de 2014

C.B. Breogán- Leyma Basquet Coruña. El partido en cinco claves.



-Inercia ganadora del Breo. Cuatro partidos, cuatro victorias. Este es el inmaculado balance del Ribeira Sacra Breogán. Y no siempre jugando demasiado bien. Este Breogán ha entrado en una espiral de éxito basada en la garra, el carácter y el instinto asesino para sacar adelante sus partidos. No resultará fácil variar esta tendencia.

-Apoyo del Palacio. Jugar en casa siempre es un aliciente. El calor del público suele dar una ligera ventaja al equipo local. En el caso del Breogán, esta premisa cobra mayor relevancia, pues estamos hablando de una de las canchas más calientes de la competición. En un derbi como este no faltará el colorido.

-Dependencia de la dupla Llorca/Matiulonis: los dos aleros titulares del equipo lucense suman más de 47% del total de la valoración del equipo. ¿Qué sucedería si uno de ellos –o ambos- fallasen? Frenar a la pareja exterior del Breogán se antoja fundamental para los intereses del Basquet Coruña.

-La aportación de los “inadaptados”: Los jóvenes Homs y Abia llegaron a Coruña bajo la vitola de jugadores de talento con un futuro enorme en el baloncesto profesional. Hasta el momento, no están respondiendo a las expectativas creadas. Ambos se combinan para sumar únicamente quince puntos -con 5/21 en tiros de campo- y seis puntos de valoración tras cuatro jornadas, bagaje que se antoja muy deficiente.

En el bando rival, todo apunta a que Tamulis tendrá más minutos con la baja de Álex López, una reválida para el joven lituano que está defraudando en el arranque liguero. También se espera más, en Lugo, de los americanos Edwards y Lawson, si bien estos están cumpliendo mínimos y todo apunta a que su integración va por el buen camino.

-Fatídico último cuarto. Un partido dura cuarenta minutos (si no hay prórroga). No por ser una obviedad resulta menos cierto. Si no que se lo digan al Basquet Coruña. Los de Tito Díaz parecen haberlo olvidado. En los tres últimos encuentros, el balance del equipo coruñés es de 83 puntos encajados –¡en sólo 30 minutos!- y 53 anotados. Si pretendemos tener una mínima oportunidad para cosechar una victoria en Lugo, debemos de competir hasta el final.

Conociendo al rival. Ribeira Sacra Breogán. Viento en popa a toda vela.

En la jornada 5 de la Adecco Oro se cruzarán los caminos de Leyma Basquet Coruña y Ribeira Sacra Breogán. Tendremos, por tanto, el primer derbi regional de la temporada. El Breo parte como claro favorito pues, además de jugar en su feudo, llega a la quinta jornada como líder invicto, ya que contabiliza todos sus partidos por victorias. Pero no olvidemos que el Basquet Coruña se llevó los dos choques que enfrentaron a ambos equipos la pasada temporada.


Echemos un vistazo a la plantilla del equipo celeste:

Dani López. Base. 1,88 m. 32 años. Uno de los veteranos del equipo y timón de la nave celeste. En sus mejores años era un jugador muy físico para la posición de uno, buen defensor e incisivo en ataque. Pero esa época ya ha pasado, Dani ha perdido explosividad en su juego, aunque ha ganado en oficio.

Adrián Chapela. Base. 1,92 m. 20 años. El “niño mimado” (lo digo con el mayor cariño, no en tono despectivo) del baloncesto lucense no acaba de desarrollar todas las facultades que lo llevaron a ser un asiduo de las convocatorias de las categorías inferiores de la selección española. Poco a poco ha ido ganándose oportunidades pero parece que le falta un poco de autoestima para consolidarse en la categoría.

Álex Llorca. Escolta. 1,92 m. 25 años. Estrella del equipo y, si mantiene el nivel mostrado hasta ahora, de la competición. Muchos nos preguntamos por qué no está en ACB. Jugador muy completo y desequilibrante: anota, defiende, asiste, rebotea…

Álex López. Escolta. 1,89 m. 23 años. “Hijo adoptivo” de la grada lucense. Buen defensor, se ganó el afecto del respetable con su entrega y compromiso. Una lesión en la mano le impedirá jugar, con toda probabilidad, el partido del sábado. 

Osvaldas Matulionis. Alero. 2,00 m. 23 años. Ya demostró en Lleida su nivel. Muy versátil y con variedad de recursos en ataque, es un buen anotador que destaca sobre todo por su solvencia en el tiro de tres puntos, como demuestra su serie de cinco triples de cinco intentos en el partido de la jornada pasada disputado en Navarra.

Justas Tamulis. Alero. 1,94 m. 20 años. Escasa participación. El joven alero lituano aún no le ha cogido el pulso al baloncesto español. Necesita tiempo para mostrar su buena mano y que es un jugador muy vertical que sabe generarse sus propios tiros. Tras cuatro jornadas de liga acumula una valoración de ocho puntos negativos. La ausencia de Álex López podría valerle para tener más minutos sobre el parqué.

Brandon Edwards. Ala pívot. 1,98 m. 23 años. Pequeño para jugar de cuatro, es un jugador explosivo, que corre muy bien la pista y que no tiene ningún tipo de contemplaciones cuando tiene el balón cerca del aro. Además posee una buena mano, lo que le convierte en un peligro en las jugadas de pick and pop. En defensa es fuerte y aguerrido. Trabaja bien el rebote, sobre todo en la zona de ataque. Aún no ha mostrado su mejor nivel en Lugo.

Kevin Van Wijk. Ala pívot. 2,03 m. 25 años. Es un jugador duro, buen reboteador y con una muñeca más que aceptable. Lesionado para varias jornadas, no estará frente a un Basquet Coruña al que ya hizo daño el pasado curso, cuando defendía la camiseta del Unión Financiera Oviedo.

Christopher Mortellaro. Pívot. 2,07 m. 32 años. Un currante de este negocio. Jugador de equipo que no destaca en ninguna faceta pero que siempre cumple con solvencia. Llegó para cubrir la baja por lesión de Samb, ahora ocupa el vacío dejado por Van Wijk. Con su profesionalidad se está ganando un contrato garantizado para toda la temporada.

Kenny Lawson. Pívot. 2,05 m. 26 años. Brazos largos para taponar. Puede atacar de fuera hacia adentro y también de espaldas al aro, solventando con tiro en suspensión o gancho de derecha. También se prodiga desde el triple. Como sucede con Edwards, necesitará aún unos cuantos partidos para adaptarse a la competición.

Mamadou Samb. Pívot. 2,10 m. 24 años. Techo del equipo. Con experiencia en ACB (Granada, Bilbao) ha decidido dar un paso atrás para recuperar sensaciones y volver a sentirse importante. Señalado como el heredero de Diouf, ha empezado fuera de forma. Envergadura y buena mano de media distancia, sus mejores armas.


En el banquillo, Lisardo Gómez, un hombre de la casa que ha devuelto la ilusión a una afición acostumbrada a que su equipo transite por la zona noble de la tabla y que este año aspira a pelear por el ascenso.

lunes, 27 de octubre de 2014

Los coruñeses a examen. Jornada 4.

Cada jornada los jugadores del Leyma Basquet Coruña se verán sometidos a una particular reválida. Cada semana, después de ver el partido correspondiente, valoraré la actuación de cada uno de los chicos de Tito Díaz con un breve párrafo y una calificación –o nota- numérica. Al final de temporada haré recuento para decidir quién ha sido el MVP del conjunto coruñes.

Empezamos con retraso, en la cuarta jornada de competición…

Dani. Salió en el quinteto inicial y asumió más riesgo que en otras ocasiones, aunque no siempre salió bien. No supo imponer el ritmo que más convenía al equipo. 4.

Ángel. Partido muy gris el suyo. No mejoró el rendimiento de Vujasinovic y se vio superado por los bases rivales. 3.

Chus. Aún no está en su mejor forma pero por momentos recordó al mejor Jesús Castro, con muestras de anticipación en las líneas de pase y penetraciones a canasta marca de la casa. 7.

Khalid. Muy errático en ataque; en defensa, Brizuela lo volvió loco. 1.

Albert. Tiene cualidades para aportar mucho más. Ya no nos extraña que en ataque apenas mire el aro pero debería sumar más en otras facetas: defensa, asistencias, rebote. 2.

Larry. Muy perdido en la cancha, no aportó nada. Y eso que Tito le dio la oportunidad de jugar bastantes minutos... Con él en pista, atacamos con uno menos. 0.

Sasha. Rápidos problemas de faltas lo borraron del partido. El equipo no se puede permitir que su mejor anotador pase desapercibido en ataque. No fue capaz de capturar ni un solo rebote... 0.

Beqa. Carácter y decisión. Junto a Castro, el jugador más resolutivo del equipo. En ocasiones se precipitó y no tomó la decisión más conveniente pero siempre dio la cara. 7.

Kyle. Su paso por el banquillo le sentó fatal. Tras un colosal primer cuarto se diluyó cual azucarillo… 5.

Laszlo. Empezó imponiendo su tamaño en ambas zonas -incluso mostró un par de movimientos interesantes de espalda a canasta- y acabó concediendo rebotes de ataque al base rival. Como Rowley, se mostró incapaz de parar a Troutman a cinco metros del aro. 5.


jueves, 23 de octubre de 2014

PEÑAS HUESCA – LEYMA BASQUET CORUÑA. El partido en cinco claves.

A pesar de tener una plantilla de calidad, el Peñas Huesca no ha estrenado todavía su casillero de victorias. Y es que ha tenido el infortunio de enfrentarse a los potentes Breogán, Valladolid y Burgos en las tres primeras jornadas de competición, por lo que este viernes saldrán muy motivados al Palacio Municipal de los Deportes de Huesca e intentarán poner un "1" en su casillero de victorias.


Intentaré dar, a continuación, las cinco claves que pueden marcar el devenir del partido:

- Jugar contra presión. 0-3 es el balance de victorias-derrotas del Peñas Huesca. El jovencísimo equipo aragonés tendrá que templar sus nervios ante la imperiosa necesidad de abandonar los últimos puestos  de la clasificación. El Leyma Basquet Coruña, con un balance de dos victorias y una derrota, llegará a Huesca con poco que perder, sin apremio, e intentará pescar en río revuelto.

- Control del ritmo de partido. Peñas es un equipo joven y no demasiado alto al que conviene un ritmo de juego muy rápido. Con Pérez, Sanz, Brizuela, Vicedo o el propio Troutman, tienen “piernas” para aguantar cuarenta minutos de ritmo frenético. Basquet Coruña, por su parte, debe de llevar el partido a otro terreno, aprovechar la superioridad física de sus pívots, y, para ello, ha de intentar que el partido se resuelva en estático.

- Evitar los altibajos. Estamos ante dos plantillas muy jóvenes, por lo que es natural que durante el partido existan rachas de acierto y errores no justificados por igual. El equipo que sea capaz de mantener un nivel concentración y de regularidad a lo largo del partido, minimizando la pérdida de balones, tendrá el trabajo hecho.

- Dominio de la zona y el rebote. Sería un peligro  para los coruñeses que el Peñas Huesca dominase su rebote defensivo (algo que no ha hecho en toda la temporada), ya que si los locales consiguen muchas capturas tendrán la oportunidad de hacer ataques rápidos en transición. El Basquet Coruña, por su parte, tiene, a priori, una superioridad manifiesta en el juego interior. Contar con dos "siete pies" como Dobos y Rowley, con la potencia de Burjanadze y con bases (Ángel Hernández) y aleros altos (Abia, Homs) debería ser garantía suficiente para dominar el rebote, forzar faltas personales a los hombres altos rivales y sumar buenos puntos.
  
- Acierto en el lanzamiento exterior. Si el equipo visitante se impone, como todo parece indicar, en el juego interior, el Peñas Huesca sólo dispone de dos armas para contrarrestarlo: presionar las líneas de pase para recuperar balones siempre que sea posible y correr el contrataque o explotar el lanzamiento de tres puntos, faceta en la que es uno de los mejores equipos de la liga. Ahí entran en juego las muñecas de los Pérez, Hart, Vicedo o Zhigulin, que tendrán que afinar al máximo la puntería para tumbar la resistencia gallega.

miércoles, 22 de octubre de 2014

Conociendo al rival. PEÑAS HUESCA. Juventud, divino tesoro.

Estreno el blog analizando la plantilla del que será nuestro rival en la jornada 4, el Peñas Huesca, un equipo que ha apostado fuerte por la juventud. No en vano, es el equipo más joven de la categoría, con una edad media que ronda los 21 años.

A pesar de su juventud, muchos de los jugadores del plantel aragonés tienen experiencia en la Liga Endesa. Es el caso de Darío Brizuela o Edgar Vicedo, jugadores cedidos por el Asefa Estudiantes, el pívot nigeriano Ehimen Orupke (jugador más veterano del equipo con sólo 25 primaveras) o el base Jorge Sanz que a pesar de tener solo 21 años ya ha defendido los colores de Real Madrid y Obradoiro.

El equipo maño cuenta en sus filas, además, con dos jugadores formados en las categorías del F.C. Barcelona, Josep Pérez y Alexander Zhigulin.

El rookie Troutman llega directamante de la liga universitaria estadounidense y está llamado a ser un referente en este equipo.


Ahí van unas líneas sobre cada uno de los miembros de la plantilla del Peñas Huesca:

Josep Pérez. Base. 1,84 m. A los 20 años disputa su quinta temporada en la liga Adecco Oro, competición donde se ha consolidado como uno de los proyectos de director de juego más ilusionantes del país. Se trata de un base intenso en defensa y con muy buena lectura en ataque. Eficaz en el lanzamiento de tres puntos, sabe asociarse con sus pívots en el juego de pick and roll y desborda en el uno contra uno, provocando muchas faltas a sus defensores.

Jorge Sanz. Base. 1,89 m. 21 años. Habitual de las categorías inferiores de la selección española, llega a Huesca procedente del equipo vinculado del Fuenlabrada que el pasado curso disputó LEB Plata. Es un jugador de carácter al que no le gusta perder. Aunque parece haberse estancado un poco en los últimos años, Sanz es un buen jugador de ataque, muy resolutivo, y tiene calidad para disputarle la titularidad a Pérez.

Darío Brizuela. Escolta. 1,86 m. 19 años. Tamaño de base, instinto de escolta. El jugador de la cantera estudiantil es explosivo e imprevisible. Muy agresivo en ataque, le encanta ir hacia el aro. Sin embargo, aún un poco verde, le cuesta alcanzar cierta regularidad en su juego.

Joe Hart. Escolta. 1,92 m. 21 años. Jugador británico que llegó a Huesca esta temporada procedente del Servigroup Benidorm de la liga EBA. Es un tirador puro que parece estar acusando el salto de categoría.

Jorge Lafuente. Alero. 1,96 m. 23 años. Jugador de la casa, se centra en tareas de poco brillo: defensa e intangibles, lo que le garantiza muchos minutos sobre el parque. Buen pasador, es una excelente ayuda en el rebote. En ataque apenas amenaza el aro rival.

Edgar Vicedo. Alero. 2,02 m. 20 años. Segunda temporada cedido en Huesca. Se espera que este año se consolide como hombre importante en Adecco Oro, y, después de tres jornadas, parece que va por el buen camino. Jugador muy completo, hoy por hoy, es la principal amenaza ofensiva del equipo oscense. No es sólo un tirador, anota desde cualquier posición, tiene visión de juego, ayuda en el rebote... no en vano es el jugador más valorado del Peñas hasta el momento. Jugador a seguir.

Alexander Zhigulin. Ala pívot. 2,05 m. 20 años. El interior kazajo destaca, sobre todo, por su excelente lanzamiento de tres puntos. Además, es un jugador bastante duro en defensa, de esos que se pegan con cualquiera. Sin embargo, no es un buen reboteador, le cuesta defender a cuatros veloces y en ataque apenas pisa la pintura.

Maksim Salash. Ala pívot. 205 m. 18 años. Jovencísimo jugador bielorruso cedido por el C.B. Sevilla. Se trata de un jugador en período de formación pero con muy buenas condiciones para la práctica de este deporte. Tiene buena mano de media distancia, suele jugar de fuera hacia dentro.

Walter Troutman. Pívot. 2,08 m. 23 años. Muchas ganas de verlo en directo. Sus 29 puntos de valoración ante el Breogán hablan de su potencial. Corre bien la pista, se mueve muy bien de espaldas al aro, resuelve bien con ambas manos cerca del aro y dispone de un muy eficaz semigancho de izquierda. También se atreve desde el triple. En defensa, es un jugador bastante solvente. Creo que es un jugador que puede tener impacto en esta liga una vez pase el período de "aclimatación".

Ehimen Orupke. Pívot. 2,13 m. 25 años. Especialista defensivo. Es un atleta que intimida y puede cambiar muchos tiros. Correcto reboteador. En ataque, trabaja para sus compañeros. Aunque no disputa demasiados minutos, puede ser importante en el partido del viernes, pues el Basquet Coruña -con Dobos o Rowley- parte con mucha ventaja de altura y kilos sobre los otros pívots rivales.

En el banquillo, tienen a un clásico del baloncesto español como jugador, Joaquín Costa Puig, el mítico Quim Costa, ex del Cotonificio, Licor 43, F.C. Barcelona o Valvi Girona, entre otros, y que llegó a vestir la camiseta de la selección española en 71 ocasiones. El que fuera aguerrido defensor, es ahora un entrenador vehemente pero a la vez cerebral, un excelente conocedor del juego y, al mismo tiempo, un motivador, al que le gusta imprimir un ritmo de juego muy vivo partiendo de una fuerte defensa.